
La necesidad de reflexionar desde las juventudes latinoamericanas acerca de los procesos de cambio abiertos en nuestra América, y de cómo enfrentar a las estrategias y los intentos de las oligarquías y el imperialismo para frenarlos, es muy importante para desarrollar nuestras organizaciones, y establecer mecanismos de articulación regional cada vez más fuertes. A la discusión, el debate y la reflexión, los y las jóvenes debemos sumar tareas prácticas para lograr una integración más completa, concreta y real, para conocer desde cerca a los pueblos que luchan y construyen día a día una Latinoamérica más unida, más digna y más soberana.